Extraditan a "El Chango Méndez" a Estados Unidos junto a 28 más

• La justicia estadounidense lo acusa de narcotráfico y crimen organizado; podría recibir cadena perpetua.

Jesús Méndez Vargas, alias "El Chango Méndez", cofundador de La Familia Michoacana. Foto: redes sociales.

Multius (multius.com.mx). Jesús Méndez Vargas, alias "El Chango Méndez", cofundador de La Familia Michoacana, fue extraditado a Estados Unidos junto con otros 28 criminales de alto perfil, en un operativo coordinado entre ambos gobiernos. Su entrega a la justicia estadounidense marca el final de un largo proceso legal con el objetivo de evitar su traslado.

Méndez Vargas fue uno de los principales líderes de La Familia Michoacana, una organización criminal dedicada al tráfico de drogas, secuestros y extorsión, que operaba principalmente en el estado de Michoacán y que se distinguió por su discurso pseudorreligioso, con el que justificaba sus actividades ilícitas. La agrupación se expandió en el centro y sur del país, extendiendo su influencia a estados como Guerrero, Estado de México y Morelos. Se le atribuye a Méndez Vargas la dirección y administración del cártel, así como el contrabando de grandes cantidades de metanfetaminas y cocaína hacia Estados Unidos, lo que llevó a que la Oficina para el Control de Activos Extranjeros (OFAC) lo sancionara en 2010 junto a otros líderes de la organización.

Su liderazgo se consolidó tras la muerte de su socio Nazario Moreno González, alias "El Chayo" o "San Nazario", quien también había sido fundador del grupo delictivo y con quien compartió la creación de un código de conducta basado en reglas estrictas para sus integrantes. Sin embargo, en diciembre de 2010, la estructura criminal se fracturó tras la aparición de Los Caballeros Templarios, liderados por Servando Gómez Martínez, alias "La Tuta", con quien mantuvo una disputa por el control del territorio y las operaciones del cártel.

A la izquierda Nazario Moreno González alias "El Chayo"; a la derecha, Servando Gómez Martínez, alias "La Tuta". Foto: especial.

Fue capturado en junio de 2011 en un operativo realizado por la Policía Federal en el fraccionamiento Campestre la Herradura, en Aguascalientes, tras ser considerado uno de los criminales más buscados en México. Su detención fue calificada como un golpe significativo a la estructura delictiva de La Familia Michoacana. En el momento de su captura, las autoridades mexicanas ofrecían hasta 30 millones de pesos por información que llevara a su arresto.

En diciembre de 2022, un tribunal federal sentenció a Jesús Méndez Vargas a 45 años y 10 meses de prisión, además de imponerle una multa de $751,218.00 pesos, tras declararlo culpable de delincuencia organizada y portación de armas de fuego de uso exclusivo del Ejército. No obstante, su defensa interpuso un recurso de apelación con el objetivo de reducir la condena o anular el fallo. En mayo de 2024, el Tribunal Colegiado de Apelación del Vigésimo Cuarto Circuito de Nayarit resolvió en contra de Méndez Vargas y ratificó la sentencia en todos sus términos.

Además, desde 2014, el gobierno de Estados Unidos solicitó formalmente su extradición, argumentando su participación en el tráfico de metanfetamina y cocaína hacia su territorio. Sin embargo, el proceso se prolongó por años debido a los procedimientos judiciales en México. Ante la inminencia de su entrega, en marzo de 2024 Méndez Vargas promovió un amparo con la intención de frenar su extradición, el cual fue concedido por el juez federal Erik Zabagoiltia Novales, otorgándole una suspensión provisional del proceso. Aunque esta medida le brindó tiempo adicional, finalmente fue insuficiente para evitar su traslado a Estados Unidos.

El fiscal, Alejandro Gertz; los secretarios de Seguridad y Protección Ciudadana, Omar García Harfuch; de Marina, Raymundo Pedro Morales; de la Defensa, Ricardo Trevilla, y el canciller Juan Ramón de la Fuente posan junto al secretario de Estado estadunidense, Marco Rubio; el titular de la Defensa, Pete Hegseth, y Pamela Bondi, nominada a fiscal general. Foto: SRE.

Finalmente, su amparo no fue suficiente para evitar que las autoridades mexicanas lo entregaran a la justicia estadounidense. Como parte de un acuerdo bilateral y en el marco de una reunión en Washington entre altos funcionarios de seguridad de ambos países, Méndez Vargas fue extraditado junto a otros criminales de alto perfil, entre ellos Rafael Caro Quintero y los hermanos Treviño Morales, en lo que se presume fue un esfuerzo de la administración de Claudia Sheinbaum para mejorar la cooperación con el gobierno de Donald Trump en la lucha contra el narcotráfico y para evitar sanciones comerciales.

Jesús Méndez Vargas ahora enfrenta un proceso judicial en Estados Unidos, donde podría recibir una sentencia de cadena perpetua por los cargos de tráfico de drogas y delincuencia organizada.